Slicon BankWASHINGTON (AP) — Ante la falta de liquidez, los bancos han recibido préstamos de la Reserva Federal por alrededor de 300.000 millones de dólares en la última semana, anunció la Fed el jueves.
Casi la mitad de ese dinero, 143.000 millones, se canalizaron a las sociedades controladoras de dos grandes bancos que colapsaron en la última semana —Silicon Valley Bank y Signature Bank— lo que desató una alarma generalizada en los mercados financieros.
La Fed no identificó los bancos o cuántos de ellos recibieron la otra mitad de los fondos.
Las compañías controladoras de los dos bancos insolventes fueron establecidas por la Corporación Federal de Seguro de Depósitos (FDIC por sus siglas en inglés), la cual se ha hecho cargo de ambas instituciones.
El dinero que pidieron prestado se destinará principalmente para pagar a sus depositarios no asegurados, dejando en garantía los bonos propiedad de ambos bancos. La FDIC ha garantizado el reembolso de los préstamos, dijo la Fed.
Las cifras brindan un primer vistazo a la magnitud de la asistencia de la Fed al sector financiero debido a la quiebra de ambos bancos durante el pasado fin de semana.
El resto del préstamo fue solicitado por bancos que buscan aumentar su liquidez, posiblemente, al menos en parte, para pagar a los depositarios que intentaron retirar su dinero. Muchos megabancos, como Bank of America, informaron haber recibido recursos de bancos menores desde la insolvencia de los dos bancos.
La Fed ha otorgado préstamos adicionales por 153.000 millones de dólares en la última semana a través de un programa establecido hace años conocido como “ventanilla de descuento”; esa cantidad no tiene precedentes en el programa.
Los bancos pueden solicitar prestamos a la ventanilla de descuento hasta por 90 días. Por lo general en una semana sólo se pueden pedir prestados entre 4.000 millones y 5.000 millones de dólares a través del programa.
La Fed ha prestado 11.900 millones de dólares adicionales de una nueva línea de crédito que anunció el domingo. El nuevo programa permite a los bancos reunir efectivo y cubrir los retiros de todos los depositarios que realicen retiros.
Los créditos de emergencia que concedió la Fed en la última semana buscan atender la principal causa de la quiebra de los dos bancos: Silicon Valley y Signature poseían miles de millones de dólares en bonos del Tesoro, entre otros, los cual son considerados seguros y pagaban bajas tasas de interés.
En el último año, a medida que la Fed subía constantemente su tasa de interés referencial, los rendimientos de los bonos del Tesoro a largo plazo aumentaron. Eso, en contraparte, reducía el valor de los bonos del Tesoro de bajo rendimiento que poseían los bancos.
Como resultado, los bancos no pudieron reunir efectivo suficiente con la venta de sus bonos del Tesoro para pagar a los depositarios que intentaban retirar su dinero. Todo devino en el clásico pánico bancario.