
En su primer juego de inicio desde que dio positivo de COVID-19, el cubano se convirtió en el único pelotero que ha bateado un jonrón en el turno inicial de una Serie Mundial. Atlanta se sobrepuso a la pérdida del lanzador Charlie Morton por una fractura en una pierna, y venció el martes 6-2 a los Astros de Houston en el primer encuentro.
Apoyados por una buena labor del bullpen, un cuadrangular de dos carreras de Adam Duvall y un elevado de sacrificio de Freddie Freeman, los Bravos navegaron tranquilos, en su primera aparición dentro del Clásico de Otoño desde que Chipper Jones y los Tres Ases del montículo brillaban con el equipo en 1999.
“Pasaron muchas cosas muy rápido”, dijo el manager de Atlanta, Brian Snitker.
El venezolano José Altuve, el boricua Carlos Correa y los demás Astros lucieron extraviados en la caja de bateo. Ésta es su tercera Serie Mundial en cinco campañas, y su primera desde que estalló el escándalo de robo de señales.
Antes del encuentro, Rob Manfred, el comisionado de las Grandes Ligas, dijo que había muchos detectives observando las cuevas, los clubhouses y el graderío para detectar cualquier posible trampa.
“Hay más gente observando lo que pasa como resultado de los problemas que hemos tenido”, comentó.

Reece James convirtió el tiro que selló la victoria de Chelsea 4-3 frente a Southampton en la tanda en Stamford Bridge. El encuentro terminó empatado 1-1 después de 90 minutos el martes.
Chelsea se puso adelante justo antes del descanso, con un cabezazo de Kai Havertz. Che Adamas igualó a dos minutos de comenzado el complemento, empujando un balón a unos pasos del arco.
Por Southampton, fallaron Theo Walcott, cuyo tiro fue atajado por el portero Kepa Arrizabalaga, y Will Smallbone, quien voló su disparo. El portero visitante Fraser Forster sólo detuvo el cobro de Mason Mount.
Los Blues, líderes de la Liga Premier y dirigidos por Thomas Tuchel, habían alcanzado la cuarta ronda al derrotar Aston Villa también por penales, después de iniciar la temporada ganando la Supercopa de UEFA al Villarreal en agosto.
Hubo otro enfrentamiento entre equipos de la Premier en Londres, en el Emirates, donde Arsenal venció 2-0 a Leeds.
Calum Chambers adelantó al Arsenal con su primer toque de balón después de tomar el lugar del lesionado Benjamin White. El zaguero remató un centro de Nicolas Pépé a los 55, para conseguir su primera diana desde 2019.
Eddie Nketiah, quien estuvo un tiempo a préstamo en Leeds, aumentó al doble la ventaja del Arsenal, que ahora ha ganado seis de sus últimos ocho partidos en todos los torneos y marcha invicto desde agosto, aunque está en la décima posición en la Liga Premier.
Habrá un equipo de tercera división entre los ocho mejores del torneo después de que Sunderland venció a Queens Park Rangers 3-1 en penaltis.
El grupo de clasificados a los cuartos de final será completado este miércoles, cuando Manchester City continúe buscando su quinto título en fila dentro de la Copa de la Liga, frente a West Ham. Burnley recibe a Tottenham, Leicester enfrenta a Brighton, Liverpool jugará contra club Preston, y Brentford visita al Stoke.

Johnnie B. Baker padre no se anduvo con rodeos.
“Salió a decirme: ‘Hombre, de la manera que acabas de perder este no veo cómo puedas ganar otro’”, recordó Baker el domingo.
Diecinueve años después desde esa charla y más de una década desde el deceso de su padre, Baker finalmente tiene la oportunidad de mostrar que el padre que tanta amaba estaba equivocado.
La oportunidad se presenta a partir de la noche del martes al mando de los Astros de Houston contra los Bravos de Atlanta en la Serie Mundial.
Baker, de 72 años, siempre tiene presente esa conversación. Y desde que los Astros despacharon a los Medias Rojas para alcanzar su tercer Clásico de Otoño en cinco años el viernes pasado, las palabras de su padre retumban más.
“Esa ha sido mi motivación”, dijo Baker.
Será la segunda participación de Baker en una Serie Mundial como piloto. Lo hizo tres veces como jugador de los Dodgers, ganando una en 1981 como un jardinero izquierdo con un productivo bate.

En lo alto del diamante del Minute Maid Park, el sol brillaba en un gran banderín sujeto a una torre de luz.
“Campeones de la Serie Mundial”, decía, junto con el número “17” y el logotipo de los Astros. Y era de oro macizo.
No, no hay ninguna mancha o asterisco en ese tributo. Al menos no aquí en Houston.
Porque si la mancha de su escándalo de robo de señales en el camino a su campeonato de 2017 se cierne sobre ellos, los Astros no la están mostrando. Dejemos que el resto del mundo del deporte los condene para siempre como los tramposos más grandes del béisbol; ellos están enfocados, según dicen, en poner otro banderín brillante en esa torre.
“No estoy preocupado por las narrativas. No estoy preocupado por nada de eso”, señaló Bregman.
De regreso en la Serie Mundial por tercera ocasión en cinco años, tienen esa oportunidad a partir del martes por la noche en el primer juego contra los Bravos de Atlanta.
Los Astros son los favoritos para ganar en Las Vegas y son apoyados en casa, pero sólo allí.
José Altuve, Carlos Correa y compañía buscan más laureles. El venezolano Luis García parece haber encontrado ya la fórmula para brillar en playoffs. Los demás lanzadores de Houston, incluido el dominicano Framber Valdez, se enfrentarán a Ozzie Albies, Austin Riley y a todos esos bateadores jóvenes de Atlanta.
Y Dusty Baker seguirá persiguiendo una coronación en otoño como mánager.
Bravos-Astros, mucho sabor en esta Serie Mundial, en la que incluso un padre se enfrentará a su hijo.
Brian Snitker es manager de los Bravos. Su hijo Troy se desempeña como coach de bateo en Houston.
“Sabemos que los Snitker vamos a tener un trofeo de la Serie Mundial en casa”, dijo el piloto de los Bravos. “No sé quién va a obtenerlo, pero vamos a tener uno, y eso es muy agradable”.
Un duelo que tardó seis décadas en gestarse confrontará a dos equipos que llegaron a militar en la Liga Nacional y que se han topado más de 700 veces, incluidas cinco series de playoffs.
Tan sólo hay que recordar a Hank Aaron y Jimmy Wynn librando un Derby de Jonrones en el Astrodome. O a Greg Maddux, Tom Glavine y John Smoltz enfrentando a Jeff Bagwell y Craig Biggio en una noche de junio.