
La escasez de dólares es un problema de larga data en el país y está asociada a la desconfianza de los argentinos en su propia moneda por las sucesivas crisis, sobre todo en períodos de inflación acelerada e inestabilidad política como la actual.
A fin de preservar el poder adquisitivo, los ciudadanos ahorran en esa moneda, mientras empresas e inversores dolarizan sus ganancias. El problema es que ahora no hay dólares para todos.
Con restricciones ya vigentes para comprar dólares para ahorro o viaje, el Banco Central limitó en junio el uso de divisas para la importación, una medida que está perjudicando a la industria, causando faltante de productos y aumentos de precios que empujan peligrosamente al país a una inflación anual de tres dígitos.
Daniel Rosato fabrica papel higiénico y de cocina en una planta situada en un suburbio al sur de Buenos Aires y en la que trabajan 140 empleados. Su producción está afectada por las dificultades para importar celulosa, la cual ya escaseaba por la guerra en Ucrania.
“Nosotros venimos advirtiendo que el Banco Central tiene un poder para permitir quién va a importar y quién no y poner límites a las importaciones. Y eso no es normal. Sabíamos que iba a generar problemas de faltantes”, dijo a The Associated Press el empresario de 61 años. “Si no mejora, sabemos que estas restricciones van a caer en un proceso recesivo”.

Artemis necesitaba otras dos vacunas para protegerse contra una diarrea potencialmente fatal y contra trastornos respiratorios. El gobierno, sin embargo, no tiene esas vacunas y habría que pagar 400 dólares para recibirlas en un consultorio privado, una suma fuera del alcance de su madre, que no tiene trabajo, y su padre, un empleado estatal.
Las autoridades de salud pública vienen advirtiendo desde hace tiempo que en Venezuela, que lleva una década de agitación política y tiene un sistema sanitario que se viene abajo, hay una tasa de vacunaciones alarmantemente baja.
El país no puede comprar vacunas a través de un sistema regional con precios accesibles hasta que salde una deuda de 11 millones de dólares, derivada en buena medida de una lucha por el poder entre el gobierno y la oposición.
Es difícil conseguir estadísticas específicas sobre las tasas de vacunación en Venezuela, donde las instituciones se manejan con mucho secreto y abundan la corrupción y la burocracia. No se publican esas tasas desde el 2015.

Rajapaksa embarcó el jueves en un avión de Saudia, antes conocida como Saudi Airlines, en dirección a Singapur, según un miembro del gobierno de Maldivas El funcionario habló bajo condición de anonimato debido a lo sensible del asunto.
Los manifestantes en Sri Lanka que ocuparon edificios oficiales para impulsar sus demandas de que se forme un nuevo gobierno dijeron el jueves que abandonarían los recintos de forma voluntaria mientras el Parlamento busca una solución.
Rajapaksa y su esposa huyeron de Sri Lanka el miércoles en un avión de la fuerza aérea, mientras los manifestantes tomaban varios edificios del gobierno para exigir su dimisión. Rajapaksa prometió durante el fin de semana que renunciaría, pero en lugar de eso nombró presidente en funciones al primer ministro en su ausencia, lo que enojó aún más a los que culpan al gobierno de la crisis.
Mientras tanto, el jueves, el gobierno anunció un toque de queda en la capital, Colombo, y sus suburbios hasta las 5 de la mañana del viernes, y los manifestantes se retiraban del palacio presidencial tras ocuparlo durante el fin de semana. Algunos extendieron una alfombra roja en el palacio al marcharse.

Artemis necesitaba otras dos vacunas para protegerse contra una diarrea potencialmente fatal y contra trastornos respiratorios. El gobierno, sin embargo, no tiene esas vacunas y habría que pagar 400 dólares para recibirlas en un consultorio privado, una suma fuera del alcance de su madre, que no tiene trabajo, y su padre, un empleado estatal.
Las autoridades de salud pública vienen advirtiendo desde hace tiempo que en Venezuela, que lleva una década de agitación política y tiene un sistema sanitario que se viene abajo, hay una tasa de vacunaciones alarmantemente baja.
El país no puede comprar vacunas a través de un sistema regional con precios accesibles hasta que salde una deuda de 11 millones de dólares, derivada en buena medida de una lucha por el poder entre el gobierno y la oposición.
Es difícil conseguir estadísticas específicas sobre las tasas de vacunación en Venezuela, donde las instituciones se manejan con mucho secreto y abundan la corrupción y la burocracia. No se publican esas tasas desde el 2015.

En Portugal, el comandante de Protección Civil, André Fernandes, dijo que más de 600 personas fueron evacuadas debido a los incendios. Unas 120 personas requirieron tratamiento médico, y dos personas —un civil y un bombero— sufrieron lesiones graves, agregó.
Unos 1.300 bomberos con ayuda de aviones hidrantes combatían el peor de los incendios en la región central del país, y otros 1.000 trataban de controlar otros fuegos.
La ola de calor europea también ha provocado incendios en España y Francia, así como en Turquía, en el otro extremo del Mediterráneo.
Más de 800 bomberos combatían dos incendios en las afueras de Burdeos en el suroeste de Francia, según el servicio regional de emergencias. Las llamas comenzaron el martes cerca de las poblaciones de Landiras y La Teste-de-Buch, y seguían fuera de control el miércoles por la mañana.
Unas 6.500 personas fueron desalojadas de sitios para acampar y pueblos en la zona boscosa. Se desconoce el número de lesionados. Los dos incendios han destruido más de 1.800 hectáreas (4.400 acres) de terreno. Imágenes tomadas por los bomberos mostraban el veloz desplazamiento de las llamas entre árboles y pastizales, atizadas por los fuertes vientos, mientras el humo ennegrecía el horizonte.