WASHINGTON (AP) — El presidente Donald Trump se prepara para tomar asiento el miércoles en la noche de apertura del galardonado musical “Los Miserables” en el Kennedy Center , donde reemplazó al liderazgo anterior con leales, se instaló como presidente y prometió eliminar del recinto de artes escénicas la programación que, según él, es “consciente” y está demasiado centrada en la ideología izquierdista y la corrección política.

La asistencia del presidente republicano a la presentación con entradas agotadas de la historia de redención en la Francia del siglo XIX ganadora del premio Tony se produce en un momento en que se ha centrado más que cualquier predecesor reciente en el centro de arte a lo largo del río Potomac que es un monumento a un presidente demócrata asesinado.

La participación de los presidentes en los asuntos del Centro Kennedy se había limitado a nombrar a los miembros de la junta directiva y asistir a la grabación de su programa anual de honores en el otoño.

Pero después de regresar al cargo en enero, Trump sorprendió al mundo de las artes al despedir al director y a la junta directiva del Kennedy Center y reemplazarlos por leales, quienes luego lo nombraron presidente y prometieron revisar su programación, administración e incluso apariencia como parte de un esfuerzo por dejar su sello en la escena artística nacional.

La aparición de Trump en la Ópera el miércoles, acompañado por la primera dama Melania Trump, también marcará su primera actuación en el Kennedy Center como presidente. Evitó el recinto tras la oposición de la industria del entretenimiento a sus políticas durante su primer mandato, rompiendo con la tradición presidencial al no asistir nunca a la grabación anual de los Kennedy Center Honors .

Sus movimientos han molestado a algunos de los clientes y artistas del centro.

En marzo, el público abucheó al vicepresidente J. D. Vance y a su esposa, Usha, tras ocupar los asientos de la planta alta de la Sala de Conciertos para escuchar a la Orquesta Sinfónica Nacional. Trump nombró a Usha Vance para la junta directiva del Centro Kennedy junto con la jefa de gabinete de la Casa Blanca, Susie Wiles , la fiscal general, Pam Bondi , y las presentadoras de Fox News Channel, Maria Bartiromo y Laura Ingraham, entre otros simpatizantes.

Se dice que las ventas de paquetes de suscripción han disminuido desde la llegada de Trump al poder, y varias producciones en gira, como "Hamilton", han cancelado sus funciones previstas en el centro. Artistas como la actriz Issa Rae y la música Rhiannon Giddens cancelaron sus presentaciones programadas, y consultores del Centro Kennedy, como el músico Ben Folds y la cantante Renée Fleming, han renunciado.

Los suplentes podrán actuar el miércoles por la noche debido al boicot de los integrantes del elenco de “Los Miserables”.

Desde su regreso a la Casa Blanca en enero, Trump ha adoptado una postura más agresiva hacia las artes. La Casa Blanca ha tomado medidas para cancelar millones de dólares en subvenciones federales de humanidades previamente otorgadas a grupos artísticos y culturales, y el proyecto de presupuesto de Trump propuso eliminar el Fondo Nacional para las Artes y el Fondo Nacional para las Humanidades.

Trump también ha atacado a los museos Smithsonian al firmar órdenes ejecutivas para restringir su financiación y al intentar despedir al director de la Galería Nacional de Retratos.

Trump recibió a la junta en una cena en la Casa Blanca en mayo y afirmó que los republicanos del Congreso han impulsado más de 250 millones de dólares para reparaciones y mantenimiento del Centro Kennedy. Afirmó que se habían gastado enormes cantidades de dinero en el centro, pero que, sin duda, no se gastaron en papel tapiz, alfombras ni pintura.

Calificó la programación anterior como “fuera de control con una propaganda política desenfrenada” y dijo que incluía “algunos programas muy inapropiados”, incluyendo una “actuación marxista antipolicial” y “Shakespeare sólo para lesbianas”.

Trump citó algunas presentaciones de drag shows como razón para tomar el control del centro, aunque la programación teatral de la próxima temporada incluye "Mrs. Doubtfire", que cuenta la historia de un hombre divorciado que se disfraza de niñera para poder pasar tiempo con sus hijos.

Trump también visitó el Kennedy Center en marzo para presidir una reunión de junta directiva y hacer un recorrido.

El Centro Kennedy, que funciona con dinero del gobierno y donaciones privadas, abrió sus puertas en 1971 y durante décadas ha sido considerado una celebración apolítica de las artes.

Se concibió a finales de la década de 1950, durante la administración del presidente republicano Dwight Eisenhower , quien apoyó un proyecto de ley del Congreso, liderado por los demócratas, que solicitaba un Centro Nacional de Cultura. A principios de la década de 1960, el presidente demócrata John F. Kennedy lanzó una iniciativa de recaudación de fondos, y su sucesor, el presidente Lyndon B. Johnson , promulgó en 1964 una ley que renombró el proyecto como Centro Conmemorativo John F. Kennedy para las Artes Escénicas. Kennedy había sido asesinado el año anterior .

Darlene Superville cubre la Casa Blanca para The Associated Press, con énfasis especial en las primeras damas y las primeras familias.

(Foto AP/Jacquelyn Martin, Archivo)