BOSTON (AP) — Los Celtics necesitarán tiempo para sacarle el mayor provecho a su talentoso plantel en la temporada. Por lo pronto, consiguieron su primera victoria, en una noche en la que celebraron el regreso oficial de sus dos principales astros.
Jayson Tatum sumó 23 puntos y nueve rebotes, y Boston doblegó el martes 105-87 a los 76ers de Filadelfia en el partido que marcó el comienzo de la temporada de la NBA.
Marcus Morris añadió 16 unidades y 10 rebotes saliendo de la banca. El dominicano Al Horford contabilizó nueve puntos y cinco tapas.
Los Celtics sobrevivieron a un inicio letárgico y de baja eficiencia al tirar a la canasta. Remontaron para liderar hasta por 18 puntos en la segunda mitad.
Boston ganó a pesar de encestar apenas al 43% (42 de 97) desde el campo y 30% en triples (11 de 37). Pero los problemas de los Celtics no perjudicaron el buen ambiente en el TD Graden por el regreso a la acción en temporada regular de Gordon Hayward y Kyrie Irving.
“Asombroso. La adrenalina fluyó durante esos primeros tres o cuatro minutos”, dijo Hayward. “Pienso que la adrenalina de todos estaba igual. Yo anduve mal al comienzo, pero fue bueno tan sólo estar ahí. Fue un gran paso para mí”.
Joel Embiid lideró a los 76ers con 23 unidades y 10 rebotes. Ben Simmons finalizó con 19 puntos, 15 rebotes y ocho asistencias.
Hayward disputó su primer partido desde que se sometió a una cirugía y a más de 10 meses de rehabilitación por la espeluznante lesión en su tobillo izquierdo, la cual sufrió a los cinco minutos del primer encuentro de la temporada pasada.
Recibió una larga ovación de la multitud local durante la presentación previa al juego, que incluyó un video de su proceso de rehabilitación.
Irving regresó también luego de un par de cirugías en su rodilla izquierda que le obligaron a perderse el final de la temporada regular y los playoffs.
Ambos se combinaron para encestar seis de 26 tiros en el juego. Hayward finalizó con 10 puntos y cinco rebotes en 25 minutos. Irving tuvo siete unidades y siete asistencias.
Incluidos los playoffs, Boston ahora tiene 10 triunfos seguidos en casa sobre Filadelfia, al que eliminó en las semifinales de la Conferencia Este la temporada pasada.
Embiid reconoció que los 76ers tienen camino por recorrer antes de alcanzar el nivel de los Celtics.
“Ésta no es una rivalidad”, dijo. “No conozco nuestro récord contra ellos, pero es muy malo. Ellos siempre nos patean... así que ésta no es una rivalidad”.