Mal día en el tiro pero buen partido en el resto de áreas del esloveno. Los Mavs arrollaron a los Magic y suman 10 triunfos seguidos en su pista.
Y los Mavericks volvieron a ganar. El equipo que comenzó la temporada en 2-7, no del todo anormal ante sus perspectivas en la casilla cero, está ya 14-11, algo mucho más ilógico e incrustado en la zona playoffs del Oeste, durísima.Esa es, por ahora, la gran obra de Luka Doncic en este primer curso NBA que apunta directísimo al Rookie del Año: su equipo gana, sus excelentes números se traducen en triunfos y en una competitividad óptima de un equipo que todavía no ha podido contar con Dirk Nowitzki y que tiene ahora lesionado a Dennis Smith, el que está llamado a formar el backcourt del futuro de la franquicia junto al esloveno...Y con permiso de Jalen Brunson, el otro novato, que está jugando de maravilla en ausencia de Smith: ante los Magic (101-76) 17 puntos y 4 asistencias.

Y tres partidos ahora seguidos en dobles dígitos de anotación para el número 33 del último draft, que está respondiendo de maravilla a la nueva carga de minutos.

Doncic, por su parte, estuvo desconectado en el tiro (2/11, 0/5 en triples) pero batió sus marcas en rebotes (11) y asistencias (9), y seguramente se quedó sin su primer triple-doble porque no hizo falta más producción en un último cuarto en el que su equipo rondó los treinta puntos de ventaja (a mitad del tercero estaba en 7+6+8).Los Magic, que tan bien habían estado jugando, han perdido tres partidos seguidos y se caen del 50% de triunfos (12-15).

En Dallas tuvieron un día horrible en el tiro: 36% con un 8/28 en triples. Vucevic arrastra problemas de muñeca (4/15 para 8 puntos), en total solo lanzaron cinco tiros libres y el número 6 del último draft, Mo Bamba, no jugó por un asunto disciplinario del que el técnico, Steve Clifford, no dio más detalles.

Demasiadas ventajas para unos Mavs tremendos en su pista: 10 victorias seguidas por primera vez desde la temporada 2007-08, cuando llegaron a enlazar doce y terminaron como locales con derrota, por poner perspectiva, contra los Supersonics de Kevin Durant... Todo son, por ahora, buenas noticias. Para Doncic y para su equipo.