SAN SALVADOR (AP) — La policía salvadoreña detuvo al presidente del equipo de fútbol Alianza y a otros directivos y empleados del estadio Cuscatlán, a quienes responsabilizan por una estampida de aficionados el fin de semana que dejó 12 muertos y más de 100 lesionados.
La Fiscalía de El Salvador informó el jueves en su cuenta de Twitter que además de Pedro Hernández, presidente del Alianza F.C., la policía también capturó a Edwin Abarca Ventura, gerente de seguridad Alianza F.C; Zoila Córdova, gerente financiera del equipo, además de a Reynaldo Avelar, gerente general de EDESSA, empresa dueña del estadio Cuscatlán, y a Samuel García Montano, encargado de las llaves del estadio.
Los detenidos serán presentados en los próximos días ante los tribunales de justicia para ser procesados penalmente por los delitos de homicidio culposo, lesiones culposas y estragos públicos.
La tragedia ocurrió el sábado por la noche, pocos minutos después de iniciado el partido de vuelta entre Alianza y FAS por los cuartos de final de la liga salvadoreña.
Según las autoridades y declaraciones de testigos, cientos de aficionados enfurecieron cuando no se les dejó ingresar al inmueble a pesar de tener boletos. Luego, comenzaron a empujar hasta derribar un portón, causando la estampida.
La Fiscalía aseguró que los organizadores vendieron más boletos de manera ilegal. “Al agotar las entradas disponibles para el encuentro deportivo, decidieron comercializar ilegalmente boletos emitidos para encuentros anteriores”, señaló.
El director general de la Policía Nacional Civil, Mauricio Arriaza Chicas, dijo que además de investigar a la dirigencia del equipo —que era el local y responsable de la administración del partido—, también indagan a las barras.
Otras líneas de investigación es la presunta sobreventa de boletos y hasta la venta de alcohol fuera del estadio, añadió y mencionó había muchos aficionados visiblemente en estado de embriaguez.
Dijo que las autoridades buscan determinar por qué los administradores del estadio sólo abrieron un portón de la zona sur y por qué lo cerraron cuando había cientos de aficionados tratando de ingresar. El sector general donde ocurrió la estampida estaba designado exclusivamente para los aficionados de Alianza.
Arriaza Chicas aseguró que el representa de la Policía desatacado en el sector general sugirió al responsable de la administración del evento que abrieran otra de las puertas, pero no aceptó.
El miércoles, la Federación Salvadoreña de Fútbol y la dirigencia de la Primera División del Fútbol Profesional anunciaron que ponían fin al Campeonato Nacional 2022-2023 tras la tragedia.
“Nuestra prioridad será la de asegurarnos que se refuercen las medidas de seguridad en los eventos de fútbol”, señalaron los organismos deportivos.