MADRID (AP) — Real Madrid y Barcelona capitularon durante la misma jornada en la Copa del Rey.
El conjunto merengue cayó por 4-3 como local ante la Real Sociedad, mientras que el club catalán sucumbió por 1-0 en su visita al Athletic de Bilbao, con un gol postrero.
Es la primera ocasión en una década que ninguno de los dos conjuntos alcanza siquiera las semifinales en el certamen. Al menos una de las dos potencias del fútbol español había llegado a la final cada año desde la temporada de 2009-2010, cuando se coronó el Sevilla.
El Barça había sido finalista durante seis años consecutivos.
La Real Sociedad fulminó la racha de 21 partidos sin perder del Madrid, al imponerse en el estadio Santiago Bernabéu, para acceder a las semifinales de la Copa del Rey por primera vez en seis años.
El Athletic superó al Barcelona gracias al tanto de Iñaki Williams, en el tercer minuto de descuento, para agravar las complicaciones del equipo blaugrana, que sigue sin carburar desde que destituyó al técnico Ernesto Valverde y nombró a Quique Setién como su reemplazo.
“Tristemente nos ha llegado el gol en un momento en que no había ya reacción”, lamentó Setién. “Hay días que tienes diez y no las metes, otros que tienes una y la metes. No sé por qué, quizá por la confianza de los jugadores”.
La escuadra bilbaína, segunda en la lista de los máximos ganadores en la Copa del Rey con 23 títulos, luce ahora como favorita en la ronda de los cuatro mejores, a la que han accedido también el Granada y un club de la segunda división, el Mirandés.
La Copa cambió de formato esta temporada. Sólo se disputan series a un partido, salvo en las semifinales.
Y parece que la modificación ha ido en detrimento de los equipos más poderosos.
“Para nosotros es un final fatídico, por todo lo que ha pasado”, lamentó el mediocampista del Barcelona, Sergio Busquets. “Jugamos un partido, de visitantes y en una jugada nos eliminan”.
El triunfo de la Real Sociedad acabó con una seguidilla de ocho victorias del Madrid y significó ser su primera derrota en todas las competiciones desde octubre.
También dio al traste con la ambición merengue de conquistar el torneo de copa por primera vez desde 2014.
El equipo txuri-urdin, semifinalista en 2014, sigue remando por su tercera corona de la Copa del Rey — primera desde 1987.
“Teníamos la intención de hacer semejante partido. Dije que veníamos a ganar ante un gran equipo en un gran estado de forma y así ha sido”, afirmó el entrenador de la Real Imanol Alguacil. “Estoy muy contento, aunque todavía no hemos hecho nada”.
Los visitantes dominaron el partido a su antojo, pero el Madrid estuvo cerca de remontarlo tras anotar un par de goles en el tramo final.
“De vez en cuando no nos salen las cosas como queremos. Ha sido un partido difícil, lo hemos intentado hasta el final y la reacción ha sido buena”, dijo el técnico merengue Zinedine Zidane.
El juvenil enganche noruego Martin Odegaard, quien juega a préstamo con la Real tras ser cedido por el Madrid, no celebró tras abrir el marcador a los 22 minutos, capitalizando un rebote dejado por el arquero madridista Alphonse Areola.
Otro juvenil de la Real, el ariete sueco Alexander Isak, aumentó al rubricar un doblete en un lapso de dos minutos al comienzo de la segunda parte — de volea a los 54 y luego con un remate al ángulo superior a los 56.
A Isak, de 20 años, también le anularon un gol cuando el videoarbitraje confirmó una posición adelantada, poco después de la reanudación.
Marcelo acercó al Madrid con un remate dentro del área a los 59, pero Mikel Merino restableció la ventaja del conjunto vasco al definir con un disparo desde corta distancia a los 69.
Rodrygo firmó el segundo del Madrid a los 81, dos minutos después que el VAR anuló un gol al también brasileño Vinícius Júnior. El tercero merengue fue obra de Nacho cuando se jugaba en el tercer minuto de descuento.
El zaguero de la Real Andoni Gorosabel fue expulsado poco antes del silbatazo final.
“Aun perdiendo 1-4 hemos creído. Hay que felicitar al rival, es así. Hay que aceptar la derrota”, dijo Zidane.