TOKIO (AP) — Los Juegos Olímpicos de Tokio necesitan nuevas fechas para las ceremonias de apertura y clausura en 2021.
No se puede hacer mucho más hasta que esas fechas sean decididas por el Comité Olímpico Internacional, el gobierno japonés y los organizadores de Tokio.
“Debemos decidirlo pronto, de lo contrario será difícil decidir sobre lo que sigue”, les dijo Toshiro Muto, el director general del comité organizador, a sus 30 directores, sentados en una sala de reuniones el jueves.
Dos días después del anuncio del aplazamiento sin precedentes, el grupo realizó la primera reunión de la que está siendo llamada la “Fuerza Especial del Nuevo Lanzamiento de Tokio 2020”. Deben rearmar los Juegos luego que fueron desmantelados por la pandemia de coronavirus.
Muto y el presidente del comité organizador, Yoshiro Mori, ofrecieron discursos animadores. Mori, un ex primer ministro de 82 años, utilizó sus recuerdos de guerra de cuando era joven para conjurar la determinación para rehacer en unos pocos meses lo que fue planeado en siete años.
Habló de su padre “yendo a la guerra en el Pacífico” y dejándole a su hijo pequeño una pelota de rugby y un guante de béisbol. “Lo siento, soy un viejo y hablo del pasado”, dijo Mori. “Estoy comparando esto con los viejos días y pudiera ser criticado por la prensa. Pero es la emoción que llevo dentro y la que siento cuando enfrentamos el predicamento delante de nosotros”.
Muto enumeró una serie condensada de deberes por resolver: boletos, seguridad, instalaciones, alojamiento, la Villa Olímpica, el transporte y conseguir voluntarios. Añadió que estaba examinando “miles de contratos” y los intereses de las cadenas televisivas, los patrocinadores, el COI, las federaciones deportivas mundiales y los comités olímpicos nacionales.
“No imaginé que seríamos puestos a prueba de esta manera”, dijo.
Habló además de otra realidad.
“Presumimos que los gastos adicionales serán masivos”,
El diario financiero japonés Nikkei ha estimado que los costos añadidos por la demora serán de alrededor de 2.700 millones de dólares. Esto sería aparte de un presupuesto oficial de 12.600 millones. La agencia nacional de auditoría dice que la cifra real es el doble.
El presidente del COI, Thomas Bach, dijo el miércoles que “todas las opciones son consideradas” para nuevas fechas. Dijo que los juegos del año próximo no tienen que verse restringidos al verano en el hemisferio norte y pudieran celebrarse antes.
Dos de las competencias más prominentes _ atletismo y natación _ ya tienen programados sus propios campeonatos mundiales para julio y agosto de 2021.
Si los juegos son trasladados a la primavera, cuando las temperaturas en Tokio son más frescas, entrarían en conflicto con la temporada de fútbol en Europa. En Norteamérica, coincidirían con las Grandes Ligas de béisbol y la NBA. Eso si los calendarios deportivos normales se han reanudado para entonces.
“Los Juegos Olímpicos aplazados necesitarán sacrificios”, advirtió Bach.