MADRID (AP) — La decisión de España de retirar una fragata que hacía ejercicios de entrenamiento con una flota de combate encabezada por un portaviones estadounidense fue puramente “de carácter técnico, militar”, aseguró el martes la ministra de Defensa en funciones del país.
Margarita Robles insistió en que la decisión “no es un tema de discrepancias” luego de que Washington decidiera desplegar el portaaviones Abraham Lincoln y varios bombarderos B-52 en el Golfo Pérsico para contrarrestar una supuesta amenaza por parte de Irán.
La flota encabezada por Estados Unidos se dirige al Golfo Pérsico en un momento de fuertes tensiones entre Washington y Teherán.
“Es más prudente interrumpirlo provisionalmente”, insistió Robles sobre la decisión de España, diciendo que se basó en los términos de un acuerdo de cooperación de dos años que colocó a la fragata Méndez de Núñez con la flota estadounidense para entrenamiento avanzado. La embarcación española y sus 215 tripulantes se dirigieron a Mumbai, India, agregó.
“Nosotros no le reprochamos en este momento al gobierno de los Estados Unidos que se haya salido del acuerdo que habían firmado (con España), sino que lo respetamos”, dijo la ministra según declaraciones difundidas por la agencia Europa Press.
“Obviamente ellos tienen que respetar también que nosotros estemos estrictamente a los términos del acuerdo que firmamos”, agregó la ministra en funciones en declaraciones a periodistas en Bruselas.
Dijo que España nunca avaló que la fragata emprendiera una misión al Golfo Pérsico y que se reintegrará a la flota de Estados Unidos una vez que se reanuden las operaciones programadas inicialmente.
Declinó hacer comentarios sobre la política de línea dura de Estados Unidos hacia Irán, pero dijo que España sigue siendo un miembro fiable y comprometido de la OTAN.