El presidente de Bolivia, Evo Morales, destacó este sábado la decisión del gobierno mexicano de no adherirse a la declaración del Grupo de Lima, que advirtió que no reconocerá el nuevo mandato del presidente venezolano Nicolás Maduro.
"Saludamos al gobierno democrático de #México por defender el principio de no intervencionismo y dejar sin apoyo los actos de golpismo diplomático encabezados por EEUU a través del Grupo de Lima", escribió el mandatario en su cuenta de Twitter.
Evo Morales Ayma
México, que antes de la asunción de Andrés Manuel López Obrador fue uno de los críticos más frontales de Maduro, dijo que prefiere mantener abiertos sus canales diplomáticos con Caracas para ayudar a encontrar una solución a la crisis política de ese país.
"El Gobierno de México, en fiel seguimiento a sus principios constitucionales de política exterior, se abstendrá de emitir cualquier tipo de pronunciamiento respecto de la legitimidad del gobierno venezolano", dijo el subsecretario de Relaciones Exteriores de México para América Latina y el Caribe, Maximiliano Reyes, en la reunión del Grupo de Lima.
"La autodeterminación de los pueblos y la no intervención son principios constitucionales que México deberá seguir (…) Por ello, en esta ocasión México no acompañará el texto que ahora se discute", agregó.
Morales tiene afinidad política con su par venezolano y le ha brindado permanente respaldo en distintos escenarios diplomáticos y políticos.
Los cancilleres de la mayoría de los países del Grupo de Lima instaron la víspera a "Maduro a no asumir la presidencia y a que respete las atribuciones de la Asamblea Nacional" y le recomendaron transferir "en forma provisional, el poder ejecutivo hasta que se realicen nuevas elecciones presidenciales democráticas".
"La democracia se sustenta en la paz, el diálogo y la autodeterminación de los pueblos", acotó de su lado el gobernante boliviano.
Los 13 países firmantes de la declaración el viernes en Perú, entre ellos Canadá y Brasil, estimaron que el proceso electoral que llevó al poder otra vez a Maduro en 2018 careció de legitimidad.
Este sábado, el Parlamento venezolano controlado por la oposición se dispone a declarar ilegítimo el nuevo mandato de Maduro, en una decisión simbólica pues sus decisiones son anuladas por el máximo tribunal -de línea oficialista-, que lo declaró en desacato desde que asumió en 2016.
Además, el diputado Juan Guaidó, de Voluntad Popular (el partido de Leopoldo López), fue elegido presidente de la Asamblea, Edgar Zambrano, primer vicepresidente; y Stalin González, segundo vicepresidente.
"Es un momento oscuro pero de tránsito hacia la democracia. Estamos aquí para cumplir con el mandato que nos dieron", expresó su discurso Guaidó.