MADRID (AP) — Los rescatistas españoles que excavan un túnel están utilizando explosivos para abrirse paso a través de una pared de roca de 4 metros (13 pies) y llegar al lugar donde creen que un niño de 2 años lleva atrapado 12 días, informaron las autoridades.
El gobierno de la provincia sureña de Málaga dijo el viernes que tardaron aproximadamente 16 horas para cavar la primera mitad de la pared.
El país está a la expectativa y sigue cada evento en el frenético esfuerzo para rescatar a Julen Rosello, quien cayó el 13 de enero por un pozo estrecho de 110 metros (360 pies) de profundidad.
Se ha cavado un pozo paralelo de 70 metros para que los mineros y expertos en explosivos de la Guardia Civil pudieran descender.
La única señal del infante encontrada hasta el momento fue un cabello que igualaba su ADN. Las autoridades se han negado a comentar sobre si el niño pudo haber sobrevivido tanto tiempo.