TEL AVIV, Israel (AP) — El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo el jueves que una “crisis de último minuto” con Hamas estaba retrasando la aprobación por parte de Israel de un esperado cese del fuego que pondría fin a los combates en la Franja de Gaza y liberaría a decenas de rehenes. Mientras tanto, los ataques aéreos israelíes mataron al menos a 72 personas en el territorio devastado por la guerra.
Netanyahu señaló que había problemas con el acuerdo poco después de que el presidente estadounidense Joe Biden y el mediador clave Qatar anunciaran que estaba completo. Eso creó una doble realidad: los palestinos cansados de la guerra en Gaza, los familiares de los rehenes retenidos allí y los líderes mundiales recibieron con agrado un acuerdo, que se espera que entre en vigencia el domingo, incluso cuando Netanyahu dijo que aún no estaba finalizado.
Todavía no estaba claro si las declaraciones de Netanyahu simplemente reflejaban una maniobra para mantener unida a su conflictiva coalición o si el acuerdo estaba en riesgo.
Se esperaba que el gabinete israelí votara sobre el acuerdo el jueves, pero la oficina de Netanyahu dijo que no se reunirán hasta que Hamas dé marcha atrás, acusándolo de incumplir partes del acuerdo en un intento de obtener más concesiones, sin dar más detalles.
Izzat al-Rishq, un alto funcionario de Hamas, dijo que el grupo militante “está comprometido con el acuerdo de alto el fuego, que fue anunciado por los mediadores”.
El acuerdo anunciado el miércoles implicaría la liberación de decenas de rehenes retenidos en Gaza y una pausa en los combates con vistas a poner fin eventualmente a una guerra de 15 meses que ha desestabilizado el Medio Oriente y provocado protestas en todo el mundo .
Hamás desencadenó la guerra con su ataque transfronterizo contra Israel el 7 de octubre de 2023, que mató a unas 1.200 personas y tomó a otras 250 como rehenes.
Israel respondió con una feroz ofensiva que ha matado a más de 46.000 palestinos, según funcionarios sanitarios locales, que no distinguen entre civiles y militantes, pero afirman que más de la mitad de los muertos son mujeres y niños. Israel afirma que ha matado a más de 17.000 combatientes, sin aportar pruebas.
La campaña militar también ha arrasado amplias zonas de Gaza y ha obligado a abandonar sus hogares a cerca del 90% de la población de Gaza, de 2,3 millones de personas. Cientos de miles de personas luchan contra el hambre y las enfermedades en precarios campamentos de tiendas de campaña en la costa, según funcionarios de las Naciones Unidas.
Netanyahu enfrenta una fuerte presión interna
La oficina de Netanyahu acusó anteriormente a Hamas de dar marcha atrás en un entendimiento que, según él, daría a Israel un veto sobre qué prisioneros condenados por asesinato serían liberados a cambio de rehenes.
El primer ministro israelí ha enfrentado una gran presión interna para que repatrie a los rehenes, pero sus socios de coalición de extrema derecha han amenazado con derribar su gobierno si hace demasiadas concesiones. Tiene suficiente apoyo de la oposición para aprobar un acuerdo incluso sin esos socios, pero hacerlo debilitaría su coalición.
Uno de sus aliados de extrema derecha, el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, ya se ha manifestado en contra del acuerdo. Otro, Bezalel Smotrich, publicó en X el miércoles por la noche que exigía una “certeza absoluta” de que Israel puede reanudar la guerra más tarde, calificando el acuerdo actual de “malo y peligroso” para Israel.
La salida de ambas facciones desestabilizaría gravemente al gobierno y podría conducir a elecciones anticipadas.
Una noche de fuertes ataques israelíes
Los palestinos de Gaza informaron de intensos bombardeos israelíes durante la noche mientras la población celebraba el acuerdo de alto el fuego. En conflictos anteriores, ambas partes han intensificado las operaciones militares en las últimas horas antes de los altos el fuego como una forma de proyectar fuerza.
“Esperábamos que la ocupación intensificara los bombardeos, como lo hicieron cada vez que había informes sobre avances en las negociaciones de la tregua”, dijo Mohammed Mahdi, quien huyó de su casa hace unos meses y se refugia en la ciudad de Gaza.
Ahmed Mattar, que vive cerca del hospital Al-Ahly de la ciudad, dijo que escuchó “ataques aéreos masivos” durante la noche.
El Ministerio de Salud de Gaza dijo que los ataques israelíes han matado al menos a 72 personas desde que se anunció el acuerdo de alto el fuego. Agregó que el saldo de los ataques del jueves solo incluye los cuerpos llevados a dos hospitales en la ciudad de Gaza y que el saldo real probablemente sea mayor.
"Ayer fue un día sangriento y hoy es más sangriento", dijo Zaher al-Wahedi, jefe del departamento de registro del ministerio.
Un reportero de Associated Press en el lado israelí de la frontera cerca de Gaza escuchó más ataques aéreos y disparos de artillería el jueves.
Una retirada gradual y la liberación de rehenes con posibles riesgos
Según el acuerdo alcanzado el miércoles , 33 de los 100 rehenes que permanecen en Gaza serán liberados en las próximas seis semanas a cambio de cientos de palestinos encarcelados por Israel. Las fuerzas israelíes se retirarán de muchas zonas, cientos de miles de palestinos podrán regresar a lo que queda de sus hogares y habrá un aumento de la asistencia humanitaria.
El resto de los rehenes, incluidos algunos soldados, serán liberados en una segunda fase —mucho más difícil— que se negociará durante la primera. Hamás ha dicho que no liberará a los cautivos restantes sin un alto el fuego duradero y una retirada israelí total, mientras que Israel ha prometido seguir luchando hasta desmantelar el grupo y mantener un control de seguridad indefinido sobre el territorio.
El alto el fuego deja preguntas sin respuesta sobre el futuro de Gaza
Se espera que mediadores de Egipto, Qatar y Estados Unidos se reúnan en El Cairo el jueves para conversar sobre la implementación del acuerdo, que llegó después de un año de intensas conversaciones con repetidos reveses.
El enviado para Medio Oriente del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, se unió a las conversaciones en las últimas semanas, y tanto la administración saliente como el equipo de Trump se atribuyen el mérito del avance.
Aún quedan muchas preguntas a largo plazo sobre la Gaza de la posguerra, entre ellas quién gobernará el territorio o supervisará la enorme tarea de la reconstrucción .
Israel ha sido duramente criticado a nivel internacional, incluso por su aliado más cercano, Estados Unidos, por el saldo de víctimas civiles en Gaza. También culpa a Hamás de las víctimas civiles, acusándolo de utilizar escuelas, hospitales y zonas residenciales con fines militares.
Hamás, un grupo militante que no acepta la existencia de Israel , se ha visto sometido a una presión abrumadora por las operaciones militares israelíes, incluida la invasión de las ciudades y pueblos más grandes de Gaza y la toma de la frontera entre Gaza y Egipto. Sus principales líderes, incluido Yahya Sinwar , que se cree que ayudó a planificar el ataque del 7 de octubre de 2023, han sido asesinados.
Pero sus combatientes se han reagrupado en algunas de las zonas más afectadas tras la retirada de las fuerzas israelíes, lo que aumenta la perspectiva de una insurgencia prolongada si la guerra continúa.
Shurafa informó desde Deir al-Balah, en la Franja de Gaza, y Magdy desde El Cairo. El periodista de Associated Press Sam McNeil, en el sur de Israel, colaboró con este artículo.
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TIA GOLDENBERG
Goldenberg es reportera y productora de Associated Press y cubre Israel y los territorios palestinos. Anteriormente informó sobre África oriental y occidental desde Nairobi.
(Foto AP/Nasser Nasser)