Entre sus clientes están Scarlett Johansson, Sharon Stone, Justin Timberlake o Julia Roberts. El último, Sylvester Stallone, asegura: "Es feroz y audaz"
No hay famoso en Hollywood que no conozca al abogado Marty Singer, renombrado como "el perro guardián" de las estrellas, por defender, incluso en tono amenazante y con formas agresivas, los intereses de sus clientes. Entre ellos están Sylvester Stallone, Scarlett Johansson, Sharon Stone y John Travolta, además de algunos acusados de abusos sexuales, como Charlie Sheen o el productor Brett Ratner. La lista es interminable: Bruce Willis, Arnold Schwarzenegger, Jim Carrey, Celine Dion, Oprah Winfrey, Naomi Campbell, Serena Williams, Kim Kardashian y Demi Moore han contratado sus servicios. Solo un caso, el de las acusaciones de violación contra el cómico Bill Cosby, ha podido con él.
Singer, de 66 años, casado desde hace décadas y padre de familia, con unos honorarios de más de 830 euros por hora de trabajo, está especializado en casos de difamación y en proteger la privacidad de los famosos. Su despacho, Lavely & Singer, detalla que su especialidad es representar a los clientes “frente a los tabloides y otros medios de comunicación y páginas web” ante disputas por la publicación de artículos que difaman sobre ellos o invaden su privacidad. También resuelve problemas legales sobre derechos de autor, propiedad intelectual o incumplimiento de contratos.
Los últimos 10 años de sus más de 30 de carrera se ha hecho con el distintivo de Mejor abogado en litigios de medios de comunicación y entretenimiento otorgado por Chambers&Partners, empresa que elabora un ranking de los mejores despachos en 180 países del mundo. Su mayor baño de masas lo vivió en 2012, cuando fue nombrado Abogado de entretenimiento del año por la organización Beverly Hills Bar Association (BHBA). Cientos de famosos se agolparon en el hotel Beverly Hills para felicitar al que Nicolas Cage calificó como “el mejor abogado del mundo”, según publica la revista Vanity Fair.
Scarlett Johansson le llamó “salvavidas” y “un superhéroe de la vida real”, mientras que la también actriz Sharon Stone dio entonces algunas pistas de por qué los famosos confían en él. “Cuando alguien me molesta, simplemente pongo en copia a Marty —dijo chasqueando los dedos— y muy pocas veces consideran continuar con su acoso hacia Sharon Stone”.
El caso de Charlie Sheen parecía complicado, pero Singer lo sacó adelante. Sheen es uno de los actores más controvertidos de Hollywood, con varias denuncias por malos tratos, amenazas y órdenes de alejamiento. Singer lo ha representado en su disputa contra los estudios Warner Bros, productora de la serie Dos Hombres y Medio, donde Sheen cobraba 1,5 millones de euros por capítulo, y de la que fue despedido por sus continuos escándalos. Según The Hollywood Reporter, Singer logró una indemnización de 100 millones de dólares para Sheen por el despido. “Tengo cien millones de razones para decir ‘Gracias, Marty’ (…). Nunca me tiré a una prostituta tan fuerte como Marty a Warner Bros”, dijo el polémico actor en público.
Mucho se ha escrito sobre las técnicas que el abogado utiliza para ocultar los trapos sucios de las celebrities. Vanity Fair describe que sus métodos son “la astucia, la fanfarronada, la delicadeza, la intimidación y el dinero”, y afirma que “asusta o aplaca” a reporteros, “parásitos” y oportunistas. La propia revista afirma haber recibido varias de las famosas cartas “apocalípticas” que el despacho del abogado suele enviar y que van firmadas con una frase amenazadora. Estas cartas consiguen que la mayoría de los casos se cierran a tiempo.
Cuando un cliente sabe que se va a difundir una información comprometida sobre él, el abogado busca “matar la historia, tomar acción antes de que las cosas salgan a la luz”, explicó Singer en una entrevista en The New York Times. Utiliza, añade el periódico, técnicas como “advertir a los reporteros las consecuencias de la falsedad o, si es necesario, comercializa con la información para limitar los daños”. Algunos de los que han confiado en él, como Sylvester Stallone, han reconocido al New York Times que Singer es “realmente feroz y audaz”, y Vanity Fair lo corrobora. “Cuando los hechos no están del lado de Singer, llega a acuerdos: entrevistas en exclusiva con sus clientes o fotografías a cambio de no publicar las historias”.
Hay un cliente que no ha corrido la misma suerte. Es el cómico estadounidense Bill Cosby, denunciado por abusos sexuales. El famoso abogado no pudo evitar que los escándalos trascendiesen y con el tiempo dejó de ser su representante, aunque ya había quedado marcado por el escándalo. Como publica The Hollywood Reporter, no ha dudo en acusar de mentirosa a la modelo Janice Dickinson, que denunció a Cosby por violación, y no es la única ocasión en la que el abogado ha llamado mentirosas, chantajistas o confabuladoras a mujeres que denuncian abusos sexuales en Hollywood para defender a actores y productores acusados de acoso.