PARIS (AP) — La policía hizo una redada el miércoles en una conocida editorial francesa como parte de su investigación a un escritor de 83 años que celebraba la pedofilia en su obra mientras un nuevo caso en su contra se abría en la corte.
Agentes inspeccionaron las oficinas de la casa editorial Gallimard en relación con una investigación preliminar sobre si Gabriel Matzneff violó a una menor de edad hace décadas, dijo un funcionario judicial. El funcionario, que no estaba autorizado a hacer declaraciones públicas, proporcionó la información a condición de anonimato.
Los investigadores buscaban fragmentos de escritos no publicados de Matzneff, según reportes de prensa.
Aunque tarde, el movimiento #MeToo está cobrando fuerza en Francia. Atletas y otras personalidades con versiones sobre incidentes ocultos por mucho tiempo están comenzando a presentar acusaciones de abuso sexual.
La redada en la editorial ocurrió mientras abogados se reunían en un juzgado en París en relación con artículos que Matzneff publicó recientemente en medios de prensa en los que defendió su relación con una adolescente décadas atrás como “el amor excepcional que vivimos juntos”.
Él tenía 50 años entonces y la chica, Vanessa Springora, 14. El mes pasado Springora publicó un libro revelador, “Le consentement” (“El consentimiento”), que trajo al olvidado escritor de vuelta al circuito literario y a la luz pública.
La Asociación Ángel Azul, un grupo para la prevención de la pedofilia en Francia, está detrás del caso en la corte. El abogado del grupo, Mehana Mouhou, dijo que espera llamar a entre cinco y 10 testigos.
Matzneff no compareció el miércoles en tribunales.
“Actualmente está en Italia bebiendo su ‘diabolo fraise’, la bebida favorita de los niños”, dijo Mouhou. “Es una provocación”.
El abogado de Matzneff confirmó que su cliente se encontraba en Italia y dijo que, dada su edad, no está claro si asistirá cuando se presenten las declaraciones y los argumentos en el caso. Eso está previsto para 2021, cuando Matzneff tenga 84 años.
El abogado, Emmanuel Pierrat, desestimó el caso como “un detalle”.
“Una investigación penal está en curso. Veamos qué pasa”, dijo Pierrat. “La cuestión es saber si hubo un crimen”.
Lejos del ámbito literario, fiscales en París abrieron otra investigación penal por acusaciones de abuso sexual de menores en el mundo del deporte en Francia. Investigan la denuncia de una mujer que brilló en el patinaje artístico sobre hielo, la 10 veces campeona francesa Sarah Abitbol.
Abitbol alega que fue violada por el entrenador de patinaje Gilles Beyer entre 1990 y 1992, cuando era una adolescente. Otras dos patinadoras han acusado al mismo entrenador y denunciado la falta de apoyo de la federación de patinaje de Francia.
El sábado pasado Didier Gailhaguet, quien presidió por años la federación, renunció en medio de sospechas de que encubrió al entrenador. Gailhaguet negó que lo haya protegido y dijo que nadie en la federación estaba al tanto del presunto abuso. Buscó culpar a un antiguo ministro del Deporte francés.
The Associated Press no suele nombrar a víctimas de abuso sexual a menos que denuncien públicamente, como lo han hecho Springora y Abitbol quienes se han identificado e incluido sus testimonios en libros recién publicados.
El libro de Springora no incluyó detalles sobre su relación con Matzneff cuando era adolescente. Cuando Matzneff era invitado a tertulias literarias nadie se sorprendía con los relatos detallados sobre su relación con menores de edad que aparecían en su obra publicada.
El documento de la corte que incluye el caso de la Asociación Ángel Azul cita fragmentos de obras que están todavía disponibles para el público.