BEIJING (AP) — Los negociadores comerciales de Estados Unidos llegaron a Beijing el jueves para empezar una nueva ronda de conversaciones encaminadas a poner fin a una guerra comercial sobre las ambiciones tecnológicas de China, mientras los funcionarios dejaban caer que podría haber avances.
El diálogo es el último capítulo en una serie de intercambios que buscan acabar con una disputa que altera el comercio, desde bienes desde soja a equipos médicos.
Los contactos comenzarán con una cena de trabajo el jueves y se prolongarán todo el viernes, explicó el vocero del Ministro de Comercio chino, Gao Feng, durante una conferencia de prensa rutinaria.
“Ambos equipos no escatiman esfuerzos” en las negociaciones, agregó.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se mostró optimista la semana pasada al señalar que “estamos muy cerca”. El jefe de la delegación estadounidense, el Representante Comercial Robert Lighthizer, señaló esta semana que las dudas sobre los detalles y su aplicación del hipotético acuerdo aún no se han resuelto.
La delegación estadounidense está encabezada por Lighthizer y por el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, quien llegó a un hotel de la capital china el jueves por la tarde. En unas breves declaraciones a reporteros, Mnuchin dijo que él y Lighthizer estaban encantados de estar de regreso y que esperaban que el encuentro fuese productivo.
Está previsto que el líder del equipo de negociadores chino, el viceprimer ministro Liu He, visite Washington a principios de abril para nuevos contactos.
Ni Washington ni Beijing han anunciado todavía acuerdos, pero analistas comerciales esperan al menos un pacto preliminar en las próximas semanas o meses. Sin embargo, apuntaron que es poco probable que el diálogo resuelva los conflictos que han enquistado la relación entre las dos mayores economías del mundo en las dos últimas décadas.