WASHINGTON (AP) — La crisis política y económica en Venezuela encabeza la agenda de la reunión del presidente Donald Trump el viernes con líderes del Caribe, una región en la que algunos países no han respaldado la exhortación de Estados Unidos para que el presidente Nicolás Maduro deje el poder.
Trump recibirá a los líderes de Jamaica, las Bahamas, Haití, la República Dominicana y Santa Lucía en su elegante club Mar-a-Lago en Palm Beach, Florida, para mostrar su respaldo a los países caribeños que respaldan una transición democrática en Venezuela. Esas cinco naciones han denunciado a Maduro o se han unido a más de 50 países en reconocer a Juan Guaidó como el líder encargado legítimo de esa nación.
El gobierno de Trump considera que el gobierno de Maduro es una dictadura, y dice que fue reelegido en unos comicios ilegítimos. Estados Unidos ha sancionado a gran cantidad de altos funcionarios venezolanos y le ha prohibido a los bancos estadounidenses hacer negocios con Venezuela, lo que ha asfixiado financieramente al país sudamericano, cuya economía está destrozada. Millones de venezolanos se han ido en busca de mejores horizontes.