WHEELING, Virginia Occidental, EE.UU. (AP) — El papa Francisco nombró el martes al obispo auxiliar de Baltimore, Mark Brennan, para dirigir la diócesis de Wheeling-Charleston, en Virginia Occidental, tras un escándalo de acoso sexual a adultos y de derroche del dinero de la institución protagonizado por su antecesor.
Brennan, de 72 años, sustituye al obispo Michael Bransfield, que renunció en septiembre tras una investigación preliminar sobre las acusaciones de mala conducta sexual y financiera.
La semana pasada, Francisco relevó a Bransfield de sus labores sacerdotales y le impidió vivir en la diócesis, además de advertirle que tendrá que pedir disculpas “por parte del daño causado”. Brennan ayudará a decidir el alcance de esas reparaciones.
Tras una nueva oleada de acusaciones por supuestos abusos sexuales en Estados Unidos, el escándalo de Bransfield se suma a la crisis de credibilidad de la jerarquía eclesiástica en el país. Varios de los altos cargos de la institución recibieron regalos personales, valorados en decenas de miles de dólares y pagados con fondos de la Iglesia, de Bransfield durante su etapa en Wheeling-Charleston, que está en uno de los estados más pobres del país.