BUENOS AIRES (AP) — El mediocampo es la principal incógnita que envuelve a Argentina de cara a los cuartos de final de la Copa América ante Ecuador.
Esa zona del equipo es la que más modificaciones ha sufrido a lo largo del certamen, algunas obligadas por lesión y otras por decisión táctica del entrenador Lionel Scaloni, quien lleva 17 partidos invicto.
Argentina inició el torneo ante Chile con Rodrigo De Paul, Leandro Paredes y Giovani Lo Celso. En la segunda presentación ante Uruguay, Paredes le cedió el lugar a Guido Rodríguez. Contra Paraguay, la Albiceleste consiguió la clasificación sin De Paul y con Paredes, Rodríguez y Alejandro Gómez como socio del capitán Lionel Messi en la generación.
En la goleada 4-1 sobre Bolivia para cerrar la primera fase, jugaron Rodríguez, Exequiel Palacios y Gómez.
Con todos los volantes a disposición, De Paul tendría un lugar asegurado el sábado ante Ecuador en Goiania. Las dudas pasan por Rodríguez o Paredes y Lo Celso o Gómez, quien anotó dos goles ante Paraguay y Bolivia.
“Me gustaría que jueguen más que once porque la mayoría merecen jugar (ante Ecuador) porque la realidad es que los chicos que no venían jugando han demostrado que pueden estar”, dijo Scaloni. “La mala suerte para el entrenador y para ellos es que solo juegan once y alguno tiene que quedar afuera, de los cuales hay muchos futbolistas que están rindiendo en buen nivel. Lo pensaremos”.
En lo que respecta al resto del equipo, el arquero Emiliano Martínez regresará tras descansar ante Bolivia por riesgo a recibir una amonestación que lo hubiera dejado fuera de los cuartos de final. Nahuel Molina será el lateral derecho, mientras que Cristian Romero y Nicolás Otamendi los centrales. En el lateral izquierdo hay una pelea muy pareja entre Nicolás Tagliafico y Marcos Acuña, aunque con una luz de ventaja para este último.
En ofensiva, Messi --máximo goleador del torneo con tres tantos-- y Lautaro Martínez son piezas fijas. Nicolás González o Ángel Di María completarán el trío de ataque.