HOUSTON (AP) — Carlos Correa, Jose Altuve y Alex Bregman estuvieron lanzando la pelota durante una práctica, luego se reunieron para un abrazo grupal cerca de la segunda base después de terminar el entrenamiento del lunes.
En lo alto del diamante del Minute Maid Park, el sol brillaba en un gran banderín sujeto a una torre de luz.
“Campeones de la Serie Mundial”, decía, junto con el número “17” y el logotipo de los Astros. Y era de oro macizo.
No, no hay ninguna mancha o asterisco en ese tributo. Al menos no aquí en Houston.
Porque si la mancha de su escándalo de robo de señales en el camino a su campeonato de 2017 se cierne sobre ellos, los Astros no la están mostrando. Dejemos que el resto del mundo del deporte los condene para siempre como los tramposos más grandes del béisbol; ellos están enfocados, según dicen, en poner otro banderín brillante en esa torre.
“No estoy preocupado por las narrativas. No estoy preocupado por nada de eso”, señaló Bregman.
De regreso en la Serie Mundial por tercera ocasión en cinco años, tienen esa oportunidad a partir del martes por la noche en el primer juego contra los Bravos de Atlanta.
Los Astros son los favoritos para ganar en Las Vegas y son apoyados en casa, pero sólo allí.
Insultados, maldecidos y molestados con botes de basura falsos en todos los estadios de las Grandes Ligas durante toda la temporada, los Astros saben que no pueden hacer nada para cambiar la mentalidad de los aficionados. El odio dirigido a ellos en las redes sociales, eso no se irá a ninguna parte pronto.
Tampoco los rumores. Durante la postemporada de la Liga Americana, hubo insinuaciones y especulaciones sobre malas acciones.
Hay que tomar nota de esto: Durante los entrenamientos del lunes, la única cámara en el jardín central era para la transmisión de Fox. El reporte oficial de las Grandes Ligas que emitió las sanciones en enero de 2020 señaló que los Astros utilizaron una cámara en el central para que les ayudara a robar ilegalmente las señales emitidas por los cátcheres contrarios.
“Sólo queremos mostrarle al mundo que somos el mejor equipo. Para que podamos hacer eso, tenemos que conseguir cuatro victorias más. No pienso que el ruido exterior nos motive en lo absoluto”, señaló Correa.
Sin embargo, es difícil ignorarlo.
“No estaba aquí con el equipo en 2017, pero me han abucheado igual que a cualquier otro”, comentó Yordan Álvarez, quien fue nombrado Jugador Más Valioso de la Liga Americana.
El jardinero Michael Brantley jugó contra Houston esa campaña mientras estaba con Cleveland. Ahora porta la camiseta de los Astros, plenamente consciente de que muchos aficionados creen que debería decir “Villanos” en el frente.
El pasado tramposo del equipo, lo sabe, forma parte del uniforme tanto como el logotipo de los Astros con la estrella. Y los persigue hasta el día de hoy.
Seguro que sí. Lo percibimos en todos los sitios a los que vamos”, señaló.
Los más criticados son los cuatro peloteros que formaron parte de ese equipo de 2017 y que siguen en la alineación: Altuve, Correa, Bregman y Yuli Gurriel.
Bregman es el que más se molesta por el tema. Altuve a menudo lo deja pasar de largo, mientras que Correa se apresura a reconocer lo sucedido.
Para el mánager Dusty Baker, es cosa del pasado. Contratado luego de que el mánager A.J. Hinch y el gerente general Jeff Luhnow fueron despedidos por el equipo y suspendidos por las Grandes Ligas, el mandamás de 72 años dijo que sus jugadores no son estimulados por los que los odian.
“Eso es lo que creo que la gente está tratando de hacer, como su principal fuente de motivación, pero eso no te motiva tanto como ir a ganar y hacia la excelencia”, comentó. “Sólo puedes dejarte llevar por el ‘te lo voy a demostrar’, o sólo puedes dejarte llevar por la motivación negativa hasta cierto punto”.
“Creo que este equipo ya superó eso porque sabe que puede jugar. Así que en esto es en lo que tienes que pensar, ¿yo contra el mundo?”, dijo. “Después de un tiempo, ¿Cuánto más puedes tener ese mantra? Así que creo que eso se ha acabado desde hace tiempo”.
Altuve, el segunda base estelar y el motor del equipo, ha estado con los Astros desde el 2011, desde tener temporadas de 100 derrotas hasta años de más de 100 triunfos. Ayudó a Houston a superar a los Dodgers de Los Ángeles en la Serie Mundial de 2017 que se fue a siete juegos y perdió una serie de siete duelos contra Washington en 2019.
¿Esta postemporada podría alterar la percepción del pasado?
“No he pensado sobre eso”, comentó Altuve. “Pero creo que tenemos la misma mentalidad de siempre, vamos a salir y tratar de ganar”.
“No hay un sólo muchacho que esté pensando en otra cosa que no sea ganar”, puntualizó el venezolano.