PARÍS (AP) — Julien Fournié se lució el martes en el Théâtre Mogador con “First Circus”, una atrevida alta costura que difuminaba provocativamente los límites entre moda y espectáculo. Fue un espectáculo fantástico, a la vez disparatado y fascinante, un homenaje apropiado a la imaginación infantil del diseñador y a su talento para lo teatral.
Los toques góticos le dieron al evento un aire diabólico, como se vio en un vestido ajustado a cuadros con paneles negros. La modelo, con el rostro pintado de manera inquietante y el cabello negro azabache, se pavoneaba como un espectro burlesco, encarnando una fusión de drama de alta costura y travesuras carnavalescas.
La extravagancia continuó con una modelo vestida con una chaqueta de traje brillante y una máscara con forma de conejo, que disparó una pistola de purpurina contra el público, un momento de alegría caótica y resplandeciente que personificó el espíritu desenfadado de la colección. Y justo cuando el desfile parecía alcanzar su punto álgido, una mujer con un tutú rosa gigante, casco y rodilleras recorrió la pasarela, consolidando el compromiso de Fournié de redefinir la alta costura a través del humor, la audacia y la teatralidad.
“Esta colección”, dijo Fournie, “es una celebración de la imaginación, un guiño al niño tímido que una vez fui, que inventaba personajes fantásticos lejos de las miradas indiscretas”.
A través de esta colección, Fournié dio vida a una variedad de personalidades (superhéroes, extraterrestres y brujas), todas realizadas con artesanía y técnicas innovadoras.
(Foto AP/Lewis Joly)