LIMA (AP) — Las protestas contra la presidenta peruana Dina Boluarte, que ya han dejado 50 muertos, parecían concentrarse de nuevo el lunes en la capital del país.
Después de varios días en los que la región sureña de Puno, donde se encuentra el visitado lago Titicaca, fue el epicentro de las manifestaciones, comunidades aimaras de la región se alistaban a viajar a Lima el lunes. En la capital se esperaba que cerca de 50.000 aimaras avivaran las movilizaciones para reclamar la marcha de Boluarte.
“A más tardar salimos este lunes. (…) queremos es viajar en unidad entre todos los pueblos aimaras”, dijo Julio Vilca, de la localidad aimara de Ilave, al diario peruano La República.
En Cusco, otra región sureña donde se encuentra la ciudadela inca de Machu Picchu, otros grupos de campesinos quechuas se preparan para partir hacia la capital.
Algunas agrupaciones de ronderos, campesinos que patrullan sus pueblos como una forma de seguridad tradicional, ya empezaron a llegar a Lima desde la región de Cajamarca, en la sierra del norte peruano, de donde es originario el destituido antecesor de Boluarte, Pedro Castillo.
La convocatoria en la capital se anunció como una “Marcha de los cuatro suyos”, en referencia a la división política del imperio incaico en cuatro jurisdicciones llamadas suyos. El mismo nombre se usó en 2000 para una de las más nutridas protestas contra el expresidente Alberto Fujimori, que gobernaba entonces tras una cuestionada reelección y huyó del país ese año en medio de escándalos de corrupción.
SAN SALVADOR (AP) — Varios cientos de opositores al gobierno del presidente salvadoreño Nayib Bukele marcharon el domingo en la capital para conmemorar otro aniversario de la firma de los acuerdos de paz que pusieron fin a 12 años de guerra civil (1980-1992) y denunciar lo que consideran un retroceso democrático en el país centroamericano.
Los manifestantes recorrieron las principales avenidas y se concentraron en el centro histórico de San Salvador. Sonia Urrutia, una de las dirigentes del izquierdista Bloque de Resistencia y Rebeldía Popular, dijo a los periodistas que estaban manifestándose al cumplirse el 31ero aniversario de los acuerdos, pero también para rechazar las medidas impulsadas por Bukele para combatir las pandillas y la posibilidad de que el gobernante busque un segundo mandato.
Urrutia denunció que el gobierno intentó impedir la marcha al colocar retenes de policías y soldados en los puntos de acceso a la capital, aunque no se observó a uniformados cerca o siguiendo la marcha. De acuerdo con reportes de la prensa se hacían registros de las personas que se transportaban en los autobuses colectivos para verificar que no portaran armas.
Ronal Amaña, un veterano político que ahora busca liderar un amplio bloque de oposición para competir en las elecciones presidenciales del 2024, dijo que estaban recibiendo el apoyo de la gente pese “a las maniobras que este hombre (Bukele) está usando, el terrorismo, para mantener al pueblo con miedo”.
En la marcha participaron varias organizaciones sindicales y de la sociedad civil, entre ellos familiares de personas detenidas durante el régimen de excepción que exigieron su libertad al asegurar que no tenían nexos con las pandillas.
En un mensaje a sus compañeros de lucha opositora, el dirigente ambientalista Ricardo Navarro aseguró que con las políticas de Bukele el país está volviendo al pasado y afirmó que “nos está condenando a una nueva guerra”.
SAN CARLOS, Bolivia (AP) — A las afueras de Santa Cruz, la ciudad más poblada de Bolivia, la autopista empieza a parecerse a un estacionamiento con decenas de camiones cargados de mercancías parados en una larga fila mientras sus agotados conductores esperan a un lado de la vía. De las ventanillas de algunos cuelga ropa mojada.
Los vehículos no pueden avanzar debido a los grandes montículos de arena apilados sobre la carretera a su paso por la localidad de San Carlos, a 110 kilómetros (68 millas) de Santa Cruz. Por entre los montículos solo circulan las motocicletas que llevan pasajeros.
La medida busca hacer que el gobierno se dé cuenta de que no puede vivir sin Santa Cruz, según Micol Paz, un activista de 32 años de Creemos, el partido del gobernador de la región de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho.
Camacho, el líder opositor más destacado del país, fue detenido en diciembre por cargos de terrorismo, lo que desencadenó una serie de protestas en esta región oriental, que es el motor económico y el centro agrícola de Bolivia. Los cortes de carreteras para reclamar su liberación, como el de San Carlos, han sembrado el caos en la cadena de distribución, dispararon los precios y agravaron las tensiones entre el gobierno izquierdista en la capital, La Paz, y la oposición de derechas en Santa Cruz.
El arresto de Camacho deriva de las movilizaciones que provocaron la renuncia del entonces presidente Evo Morales en 2019. El partido de Morales, que ha regresado al poder, acusa al gobernador de orquestar unas protestas que califica de golpe de Estado. Esos disturbios causaron 37 muertos.
LIMA (AP) — Las protestas contra el gobierno de la presidenta peruana, Dina Boluarte, sumaron una nueva muerte en el sur del país el jueves, un adolescente de 16 años. Llegaron a 49 fallecidos por la convulsión que inició en diciembre, luego de que el Congreso destituyó al mandatario Pedro Castillo por intentar disolver este poder del Estado para evitar su remoción.
La última víctima fue identificada con las iniciales B.A.J, de 16 años, y murió en la región sureña de Puno, según el reporte de la Defensoría del Pueblo el jueves al mediodía.
Los familiares dijeron que llevaba internado desde hacía dos días en estado crítico por tener incrustada una bala en el cerebro, en una transmisión con el sitio web del diario peruano La República.
Con este deceso, se elevaron a 19 los fallecidos durante las protestas en Puno, donde el lunes ya se había registrado la jornada más letal de la convulsión en el país andino, que incluyó la muerte de un policía calcinado en su coche patrulla tras ser atacado por un grupo de manifestantes.
La Defensoría del Pueblo reportó el jueves que hubo movilizaciones, paralizaciones y bloqueos de vías en 35 provincias, la mayoría de regiones del sur del país.
Además, registró 80 puntos de bloqueo en vías nacionales y un cerco de manifestantes a un centro comercial en la ciudad de Arequipa, en otra región sureña del mismo nombre.
CIUDAD DEL VATICANO (AP) — El papa Francisco dará el último adiós al cardenal George Pell durante su funeral el sábado, dijo el Vaticano el jueves, mientras surgen revelaciones de la creciente preocupación del prelado australiano sobre lo que consideraba el “desastre” y la “catástrofe” de papado del argentino.
Según el Vaticano, el decano del colegio cardenalicio, el cardenal Giovanni Battista Re, oficiará el funeral de Pell en la basílica de San Pedro. Como es costumbre cuando fallece un cardenal, Francisco pronunciará un responso y un saludo final.
Pell, que fungió como el primer ministro de Finanzas del pontífice durante tres años antes de regresar a Australia para enfrentar acusaciones de abusos sexuales a menores, murió el martes en un hospital de Roma por problemas cardíacos tras una operación de cadera. Tenía 81 años.
Desde que en 2020 fue exculpado de las acusaciones de abusar de dos niños que formaban parte del coro cuando era arzobispo de Melbourne, Pell dividía su tiempo entre Roma y Sydney. La Corte Suprema australiana revocó la condena de un tribunal menor y el cardenal quedó libre tras pasar 404 días en aislamiento.